CUANDO CAMBIAR LOS NEUMÁTICOS DE TU COCHE
El neumático es la parte del coche que está en contacto directo con la carretera. Por lo tanto, su estado tiene un impacto directo en aspectos importantes como la manipulación y la seguridad. Según anasegurosauto.mx tenemos que asegurarnos de que se mantienen adecuadamente, pero también tenemos que saber si es el momento de sustituirlos. En este artículo se explica con qué frecuencia deben sustituirse los neumáticos y cómo diagnosticar su desgaste.
Hay varios factores que afectan a la vida de los neumáticos. Algunos de ellos dependen de nosotros, como su desgaste, nuestro estilo de conducción o su mantenimiento. Otras están directamente relacionadas con el fabricante y la calidad de su producto o el proceso de almacenamiento. Dependiendo de estos aspectos, la vida útil puede ser mayor o menor, pero si te preguntas cuántos años durará un neumático, damos una estimación aproximada de unos 5 años. A partir de entonces, deberá consultar a un especialista al menos una vez al año para saber si es posible seguir conduciendo con estos neumáticos.
Si quieres que tus neumáticos duren lo máximo posible, debes elegir marcas conocidas por su calidad, conducir de forma eficiente y acordarte de mantenerlos lo mejor posible. Pero por muy bien que los cuides, los neumáticos no son resistentes a la intemperie y, aunque no los uses demasiado a menudo, van perdiendo sus propiedades. Una vez que han transcurrido 10 años desde su fabricación, el neumático se considera obsoleto y ya no es apto para su uso en la carretera, aunque todavía parezca estar en buenas condiciones.
La forma más fácil de saber si un neumático está desgastado es mirando el grosor de la banda de rodadura. Si es inferior a 1,6 mm, el neumático ya no se considera apto para la circulación. Este es el valor mínimo establecido por la ley, y conducir con una profundidad de la banda de rodadura inferior a 1,6 mm se castiga con una multa. En cualquier caso, es aconsejable no llegar al límite legal de 1,6 mm y cambiar el neumático cuando la banda de rodadura tenga 2 mm de espesor.
Con una moneda de un euro se puede comprobar fácilmente si el neumático sigue siendo apto para la circulación. Introduzca la moneda de 1 euro en la banda de rodadura y compruebe si el borde exterior dorado de la moneda es visible o no. Si la llanta está completamente oculta, significa que el neumático está en buen estado de desgaste. Por otro lado, si la llanta exterior es total o parcialmente visible, el neumático debe ser sustituido sin duda.
PINCHAR UNA RUEDA
Los pinchazos son a veces inevitables. Dependiendo de la magnitud del daño, puede ser posible repararlo y seguir conduciendo, pero esto debe decidirlo un experto tras un análisis exhaustivo del neumático. En algunos casos, los daños en el neumático son irreparables.
DAÑOS VISIBLES O INTERNOS
Un neumático puede resultar dañado al golpear objetos duros como bordillos o baches, especialmente si se conduce a gran velocidad. Aunque no esté pinchado, el neumático puede haberse desgarrado o el interior del neumático puede haberse vuelto áspero debido a la conducción con una presión insuficiente. En estos casos puede ser necesario sustituir el neumático.
USO Y DESGASTE EXCESIVO
El neumático puede estar más desgastado de lo que debería en una zona concreta, en el centro o en los bordes. Dichos baches pueden ser causados por una alineación inadecuada, un balanceo, problemas de suspensión o de transmisión, o una presión insuficiente de los neumáticos. Por este motivo, el vehículo debe ser revisado periódicamente y, cuando se monten neumáticos nuevos, deben equilibrarse adecuadamente y revisarse la dirección.
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