EXTREMADURA (ESPAÑA)

Extremadura es una de esas zonas todavía vírgenes para el enorme turismo y que tiene mucho que ofrecer. Su notable extensión condiciona la pluralidad y contraste de sus tierras, cuyo relieve se distribuye en 3 grandes sectores: Por una parte las sierras, que abarcan el sur del Sistema Central, los Montes de Toledo y la parte occidental de la Sierra Morena; por otro las llanuras y vega de los ríos Tajo y Guadiana; y finalmente las penillanuras de la baja Extremadura. Puedes ver todo lo relativo a esta preciosa región española en https://miextremadura.es

EXTREMADURA

Su tiempo es continental, con inviernos cálidos, suavizados por la cercanía del Océano Atlántico, y con escasa lluvias en otoño y también invierno. Los veranos son calurosos, alcanzando temperaturas máximas que superan los 30° C.

Sus tierras cruzadas por 2 grandes ríos y salpicadas de embalses, ofrecen un hermoso paisaje y hábitat para esenciales concentraciones de especies conminadas de la fauna europea. Ello podemos apreciarlo singularmente en sus reservas y Parques naturales.

Su situación geográfica, como puente entre la meseta y las sierras del sur, hicieron que desde la antigüedad se asentasen en ella diferentes civilizaciones. Mas es con el planeta romano cuando Extremadura entra en las páginas de la historia, transformando a la urbe de Mérida en una de las diez más esenciales del Imperio. La zona fue más tarde habitada por los árabes, y a lo largo de un buen tiempo su territorio fue frontera de la Reconquista. Su edad de oro llegó con el descubrimiento de América, siendo cuna de los más esenciales conquistadores del Nuevo Planeta.

El norte de Extremadura, con un increíble paisaje de serranías, estrechos desfiladeros, rica flora y exuberancia de agua, tuvo en la antigüedad bastante difícil acceso, con lo que, hasta el día de hoy, se puede estimar el mantenimiento de sus ricas tradiciones y costumbres. Al sur, al lado de la riqueza arquitectónica, hallamos una enorme riqueza paisajística en las estribaciones de la Sierra Morena, donde abunda la caza mayor y menor.

Extremadura conserva tradiciones folclóricas muy, muy diferentes de unos pueblos a otros y esto se hace patente en sus fiestas populares. En su artesanía resaltan el trabajo de metales de Guadalupe, la porcelana y los bordados.

La visita a estas tierras acaba con una cocina artesanal digna de culto. Esta, elaborada a base de verduras y hortalizas, espléndidas chacinas y gran pluralidad de quesos, ofrece verdaderas sorpresas. Mas lo más digno de mencionarse no es exactamente la riqueza y pluralidad de ingredientes sino más bien la originalidad en su preparación, que en ocasiones con ingredientes de la mayor simpleza logra recetas literalmente excelentes. Sus conocidas migas, son un caso de este particular, un guiso a base de miga de pan que con sabia preparación depara las exquisiteces del paladar. Otra de sus especialidades son las truchas, platos con carne de caza, incontables dulces tradicionales. Todo ello regado con los espléndidos vinos de las diferentes regiones dan una idea tan solo aproximada de los muchos secretos culinarios a descubrir en esta zona.

Visitas de interés:

Mérida
Mérida exhibe múltiples de los más esenciales monumentos romanos de España. Además de su gigante teatro romano, conserva un anfiteatro, 2 acueductos y un puente romano, sin olvidar el Museo de Arte Romano que cobija piezas de valor incalculable. Basándonos en estas reliquias históricas y a su estado de conservación, el conjunto arqueológico de Mérida fue declarado por la UNESCO en mil novecientos noventa y tres «Patrimonio de la Humanidad».

Cáceres
La capital de la Alta Extremadura, se puede estimar una reliquia histórica, con sus recoletas calles sembradas de monumentos de piedra. Su distrito viejo, flanqueado por murallas de la temporada musulmana con impresionantes torres vigía, conjuga en singular armonía monumentos y también iglesias medievales con palacios renacentistas. En reconocimiento a la belleza y estado de conservación de su circuito histórico, la UNESCO la nombró en mil novecientos ochenta y seis «Urbe Patrimonio de la Humanidad». Sus muralla almohades y edificaciones de inestimable valor histórico y arquitectónico hacen de esta villa un retrato de los siglos XIV al XVI como dejan patente sus casas fuertes, palacios y edificios religiosos.

Trujillo
Muy antigua villa como fortaleza sobre un enorme bloque de grano, fue hogar de celtas, romanos, musulmanes y cristianos, como urbe natal de conquistadores como Pizarro. Su Plaza Mayor porticada, el Castillo que la domina, palacios y también iglesias, como la vieja muralla que todavía conserva 4 de las 7 puertas de entrada a la urbe, son muestras de su gran monumentalidad.

Guadalupe
Urbe dominada por un gigante monasterio de estilo mudéjar. Su impresionante testera, su portada, su claustro y las esenciales obras de arte que en su interior alberga, son razón suficiente para justificar su celebridad. «El Real Monasterio de Santa María de Guadalupe» fue declarado en mil novecientos noventa y tres por la UNESCO «Patrimomio de la Humanidad».

Plasencia
Una hermosa urbe con una catedral gótico-plateresca, murallas medievales y abundantes palacios y casas solariegas.

Badajoz
La capital de la Baja Extremadura conserva una Alcazaba almohade y ciertos restos de las murallas y torres vigías que completaban la defensa esta, una catedral y una plaza de estilo mudéjar, la Plaza Alta.

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