Los remises son reconocidos por ser un servicio de calidad, rápido y sobre todo confiable. Aunque, no es una razón para ser totalmente descuidado a la hora de agarrar un remis.

Créelo, así como nosotros evaluamos el servicio ofrecido por las agencias de remis, muchas de las agencias también nos evalúan como clientes. En ese caso, te informaremos más al respecto.

¿Cómo nos evalúan las agencias como clientes?

Un gran número de agencias de remises registran los números telefónicos de sus clientes con un código y direcciones frecuentes de los mismos. Cuando el cliente genera inconvenientes a la hora de cancelar o simplemente al ejecutar el servicio, su código es marcado como un cliente problemático.

Al marcarse como un cliente problema, sus llamadas dejan de ser atendidas. Incluso si el cliente llamase desde otro número telefónico para despistar, pero solicitase el servicio a sus direcciones frecuentes, tampoco será atendido.

Ahora, te daremos los consejos para agarrar un remis

Una vez hablamos de la importancia de evitar ser clientes problemáticos, es hora de saber cómo ser uno bueno. Además, te daremos otros consejos para cuidar tu integridad y seguridad.

Aunque los remises son muy seguros, en cualquier ámbito de la vida es fundamental tener precaución o saber cómo actuar ante cualquier inconveniente.

Solicita el remis solo cuando estés listo

El transcurso desde la llamada a la agencia y la confirmación de querer el servicio, hasta la llegada del conductor a tu dirección, suele ser de unos 5 o 6 minutos. Por esa razón, debes procurar estar listo para la partida. No hagas esperar al conductor porque será de muy mal gusto.

No olvides preguntar por la tarifa

Además de la importancia de saber cuánto pagarás por el servicio, es esencial notificar si tienes el dinero exacto o si necesitarás cambio. De lo contrario, podría crearse una incomodidad al tratar de resolver.

Avisa que vas a tomar un remis

Cómo dijimos anteriormente, los remises son conocidos por la seguridad ofrecida gracias a las agencias. Sin embargo, siempre es mejor ser precavidos ante cualquier situación que pudiera ocurrir.

Por eso, una vez estés en el coche, avísale a un amigo de confianza o familiar de la salida hacia tu destino, y avísale cuando llegues también.

Si pasado mucho rato y no avisas de tu llegada, podrán concluir una situación extraña porque algo no está bien. De esa manera tomarán medidas al respecto e incluso buscarán la matrícula del coche.

Guarda el número de la agencia

Si ocurre algún problema y está todo fuera del control del conductor, llama a la agencia y cuéntaselos. Ellos prestarán el apoyo necesario para solventarlo. Puedes estar seguro de que recibirás ayuda.

Manifiesta tus incomodidades

Si algo te hace sentir incómodo o simplemente te parece fuera de lugar, díselo al chófer. Él seguramente no estará al tanto tu molestia si no decides comentárselo. Así como queremos ser buenos clientes, también queremos un buen servicio. Y no está mal exigir lo merecido.

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