La crisis de los 18 meses – ¿Qué es y como la manejo?

Muchas madres creen que la crisis de los 18 meses es tan solo un mito o que tan solo es la crisis de los 2 años que se ha adelantado, sobre todo en madres primerizas. No obstante, es una realidad inminente por la que la mayoría de los niños atraviesan durante su crecimiento, la cual es completamente normal. Sin embargo, es importante que como padres conozcamos muy bien acerca de esta crisis para saber cómo manejarla con las herramientas adecuadas para así poder repercutir positivamente en la vida de nuestros pequeños.

Conoce qué es la crisis de los 18 meses

También conocida como ansiedad por separación, brote de crecimiento o autoafirmación, la crisis de los 18 meses es una de las fases menos conocidas por los padres, a pesar de ser tan importante para el crecimiento y desarrollo del pequeño. Por ello, en este artículo te hablaremos de todo acerca de esta crisis, para que así puedas ayudar a tus hijos en este momento tan difícil de sus jóvenes vidas.

Primero, debemos conocer a lo que nos estamos enfrentando, es decir, conocer a fondo de  qué se trata la crisis de los 18 meses. Básicamente, serán un conjunto de cambios físicos, emocionales, conductuales, cognitivos y, sobre todo, de independencia, por loa cuales va a travesar nuestro hijo mientras que deja de ser un bebé para pasar a ser un niño. Se considera una fase complicada porque en muchas ocasiones nuestro hijo no comprende todos los cambios que esta presenciando, por lo que se genera una crisis.

Durante este brote de crecimiento, nuestro hijo puede actuar como un bebé o como un niño, dependiendo de su evolución. Así que no es de extrañarnos que después de un progreso o de presentar actitudes de niño este se comporte de nuevo como un bebé, mucho menos debemos confundirlo con malcriadez o capricho. Recuerda que cada niño va a vivir este proceso de forma diferente por lo que las actitudes pueden ser diferentes en cada uno de ellos.

Esta etapa se caracteriza por la aparición de rasgos de independencia como el aprender a elegir qué les gusta y qué no como también añade la palabra “no” en su léxico, permitiéndole expresar sus opiniones y reafirmando sus gustos y requerimientos. Aquí es donde los padres debemos comprender que la etapa de bebé ha quedado atrás y que nuestro hijo ya está comenzando a tomar decisiones y es capaz de formular opiniones e ideas personales. Por ende, evita menospreciar sus comentarios o pensamientos.

También vamos a notar que nuestro hijo empieza a hacer cosas que antes no hacía antes como el escoger la ropa que se va a colocar por sí solo, opinar acerca de lo que quiere comer, opinan acerca de los colores que les gustan, entre muchas otras cosas. De esta manera están expresando que ya están desarrollando la capacidad de tomar decisiones sobre sus gustos y necesidades, así parezcan muy pequeñas.

Características presentes durante la crisis de los 18 meses

Durante esta etapa se van a presentar una serie de características que nos va a permitir diferenciar o reconocer que nuestro hijo está pasando por la crisis de los 18 meses. Estás se caracterizan por ser repetitivas y constantes, por lo que identificarlas va a ser mucho más sencillo para los padres:

  • Te ofrece cosas como si de un juego se tratara, todo aquello que tengan accesible y puedan agarrar con sus manos como billetes, juguetes, llaves, ropa o cualquier otro objeto y te lo ofrecerán. Esto va a suceder varias veces al día, y el niño busca un agradecimiento cada vez que te ofrezca algo nuevo.
  • Todo aquello que le cause curiosidad o interés los va a señalar para que las personas a su alrededor también lo vean. Como también va  a suceder cuando quieran o necesiten algo, lo van a señalar para que se lo facilites.
  • Van a tener demostraciones de afecto con personas que no conoce, por lo que va su sentido de compañerismo y de compartir se empezarán a desarrollar en esta etapa.
  • Va a acompañar el vocablo “no” con una acción gestual. Es decir, mientras que dice que no, va a mover la cabeza de un nada a otro para demostrarlo en un lenguaje no verbal.
  • En este momento la curiosidad va a aumentar significativamente sumado por lo que va a empezar a comprender cómo funcionan las cosas, sobre todo objetos como el teléfono, el cepillo de dientes o la cuchara.
  • Comenzará a hacer garabatos cada vez que tenga un lápiz o una crayola cerca, independientemente de la superficie que se encuentre.
  • Rabietas o frustración cuando no logra realizar una actividad que está llevando a cabo o que todavía no controla.

¿Cómo manejar la crisis de los 18 meses de mi hijo?

Sin duda alguna, el papel de los padres durante la crisis de los 18 meses es de gran importancia para el desarrollo y desenvolvimiento de los niños, por lo que aprender a manejar esta fase será crucial tanto para nosotros como para ellos. A pesar de ser una etapa muy importante, lo único que vamos a necesitar para sobrellevarla es comprensión, paciencia y determinación para poder apoyar a nuestro hijo en su paso de bebés a niños, donde comenzarán a presentar una maduración bastante clara.

Uno de los errores más comunes que muchos padres comenten es regañar a los niños durante este proceso, lo cual solo produce que estos se cohíban de expresar sus opiniones y se sientan retraídos. Por ende, la mejor opción será siempre acércanos a ellos y conversar acerca de lo está aconteciendo y como se sienten con respecto a los que le está sucediendo, de esta manera comprenderlos.

También puedes optar por ayudarlos con sus tareas básicas como bañarlos, cepillarse los dientes, peinarse, escoger su ropa, comer, entre otras, siempre y cuando el pequeño lo permita. Debemos entender que todavía son complicadas para ellos, pero desean empezar a realizarlas por si mismos.

jhurtado4

Jose Manuel Hurtado Sierra

También te podría gustar...

Deja una respuesta