Independientemente de la región que sea, siempre suelen enfrentarse ideologías distintas que señalan diferentes posiciones sobre el estado y nivel de la economía, pero resulta innegable que algunos países enfrentan duras crisis debido a su deteriorado sistema financiero, lo que ocasiona un déficit en diferentes sectores que a su vez terminan en una economía completamente inestable y disfuncional, pese a que para muchos incluyendo representantes de los gobiernos de turno realcen lo contrario, por ello ahora nombraremos algunos de los principales indicadores que reflejan una economía estable y sana.

Primero que nada, un fuerte indicador de una economía funcional y estable es el equilibrio entre la oferta y demanda en principales bienes productos y servicios, con relación al salario mínimo y el poder adquisitivo de las personas, esto quiere decir que debe existir un balance real, que permita a cualquier ciudadano acceder a los elementos básicos y esenciales como alimentación, salud, vivienda y demás en base al salario devengado por la mayoría.

Otro indicador relevante es el rendimiento comercial e industrial, esto se refiera a que debe existir un nivel de producción general capaz de cubrir tanto las demandas nacionales como las de exportación en diferentes sectores y rubros, ya que esto es una base fundamental y esencial para mantener un equilibrio real entre la oferta y demanda. Los emprendimientos y los negocios al por menor son otro fuerte indicador, mientras que en una economía estable el mercado se mantiene limitado a cierto porcentaje, en una economía deficiente los negocios independientes e incluso ilegales proliferan como bacterias que terminan desestabilizando los mercados en general.

Uno de los más relevantes e importantes es una baja o casi nula deuda externa, ya que resulta imposible para una nación endeudada cubrir las principales necesidades financieras del estado. De igual forma una economía saludable se ve reflejada en un incremento importante del PIB, afectando los mercados productivos de forma positiva, al contrario de la inflación que se produce en un mercado donde la economía es deficiente.