Pensando Pensamientos es con P de pensar simple, y es lo que quiero pensar hoy, pensar simple. En las musáceas tenemos un plátano diploide (un plátano ornamental) que sólo se reproduce por semilla (reproducción sexual), mientras los otros se reproducen de forma asexual o vegetativa, es decir, se reproducen por colinos o rizomas; igual ocurre con el corozo, que sólo se reproduce por semilla, mientras el chontaduro se reproduce por semilla y por hijuelos.

Los bananos forman su racimo en la raíz, y a medida que avanza la “gestación” éste va subiendo por el seudotallo. Si usted corta el seudotallo, verá el “feto” del racimo que sube, y llegada la hora lo expulsa, lo “pare” como los vivíparos.

Lo mismo ocurre con la cidra o cidra yota o guasquila o xuxu (Shechum edule), cuya semilla fecundada avanza del centro hacia fuera, y llega un momento en que es expulsada o “parida”, y la semilla sale con raíz y tallo y queda prendida al “útero”, al fruto, que la sigue alimentando hasta lograr su desarrollo. ¿No son estos ejemplos una bella, simple y hermosa forma de enseñar reproducción?

Pensemos simple: la papa es un tallo modificado, no es una raíz. Si estiramos el tallo, sembrando la papa sobre llantas superpuestas, tendremos más tallo y por supuesto más área de producción de papas.

Pensemos simple, no conocemos la flor de la zanahoria, porque la cosechamos tierna para poderla consumir, pero sí dejamos en la era tres o cuatro zanahorias que terminen su ciclo vegetativo, al final producirán flores (una bella sombrilla blanca) y luego semillas, que si se cosechan se obtendrán semillas para muchas siembras.

Los reto a que injerten sobre un patrón de cítrico, una yema de naranja, otra de mandarina y otra de limón, y a los tres años podrán cosechar del mismo árbol naranjas, mandarinas y limones.

La vida es simple, maestros, la naturaleza nos enseña a enseñar.