Plastilina casera receta sencilla para hacerla

 

Suave, ligera, colorida y moldeable, desde su creación en el año 1890 por Franz Kolb, este invento a acompañado horas de juegos de los niños y contribuido a su creatividad ya por varias generaciones en todo el mundo.

Acá en explícalo, vamos a decirte como hacer esta divertida masa con ingredientes comunes que encontraras en tu casa.

Es tan fácil que a este proyecto se puede añadir los más pequeños. Seguro que se sentirán felices de participar en este proceso y se creerán todos unos científicos.

Como queremos hacer varios colores te vamos a dar la receta en base a cada poción:

Materiales:

  • Harina (1 de taza para cada color)
  • Sal (1/2 de taza para cada color)
  • Aceite (1 cucharada para cada color)
  • Colorante de comida (entre 15 a 30 gotas por cada poción)
  • Agua (1 de taza para cada porción)
  • Una olla
  • 1 cuchara de polvo de hornear (esto es opcional, se usa para que la plastilina dure más tiempo)
  • Bolsitas plásticas para almacenar. 

En caso de que los pequeñines quieran participar es recomendable que uses los siguientes utensilios adicionales:

 Un bowl pequeño para cada color (si los niños te van a ayudar a hacer la plastilina)

  • Un gotero y una cuchara pequeña
  • Una superficie para amasar

Para hacerla tienes dos opciones, si a tu proyecto se suman pequeños científicos es recomendable usar los bolw para que todo esté ordenadito y ellos vayan viendo el proceso de cambio de agua, e color hasta convertirse en la plastilina. Esto es algo muy estimulante y los mantendrá entretenidos. En caso contrario de hacerlo en solitario, puedes optar por poner todo en la olla.

Los pasos que vamos a hacer corresponden a una porción o color, por lo que debes repetirlos para obtener más bolitas coloradas de distintos matices.

 

Pasos:

 En una olla o bolw pon la taza de agua, agrega 15 gotas del colorante vegetal. Si trabajas con niños es recomendable poner en una cuchara las gotas para que ellos de la echen al agua. También puedes ayudarte con un gotero.

En caso de que quieras un color más suave pon menos cantidad y si quieres un tono más brillante agrega más. Recuerda no excederte lo recomendable es que sea un máximo de 30 gotas para no saturar la mezcla.

  1. Agrega la cuchara de aceite y mezcla para integrar todo.
  2. Una vez hecho esto procedemos a agregar la taza de harina y la media de sal y el polvo para hornear.
  3. Mezcla los ingredientes de a poco para evitar desastres, puedes ayudarte con una cuchara.
  4. Cuando veas que el color se ve uniforme y bien integrado, ponlo en la olla a fuego lento, ve revolviendo hasta que la mezcla vaya endureciéndose y comience a despegarse de los bordes de la olla.
  5. El punto para saber si esta para retirarla del fuego es cuando se torna más dura y al mezclar se apelmaza en el centro de la olla. El tiempo de cocción varia por el tipo de harina, pero no tarda mucho tiempo hasta estar lista.
  6. Sácala de la olla, para amasar sobre una mesa limpia, recuerda que está caliente así que espera unos minutos antes de hacerlo. Si aún está algo blanda y no es moldeable. Ponla en el fuego un tiempo más hasta que agarre consistencia.
  7. Luego de amasada, ya está lista para usar. Para almacenar usa as bolsas plásticas, si tiene cierre hermético mejor. Recuerda sacar el aire para que duren más tiempo suaves.

Ya puedes tener horas ilimitada de diversión moldeable y siempre podrás tener más ya que es tan sencilla y práctica ¡Diviértete!

Deja una respuesta