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Recuerde que una estantería eficaz refleja tanto su estilo como su carácter. Ya antes de comenzar a rematar las estanterías, asegúrate de trastocar lo que no precisas o bien no te agrada. Póngase en marcha desechando el desorden. Si ya no satisface una necesidad o bien tiene un valor nostálgico, puedes tirarlo o bien obsequiarlo. De esta manera tendrás presente las cosas que te agradan -como las fotografías familiares o bien las apreciadas gangas de viaje- para una presentación verdaderamente próxima.

El contraste entre una estantería desorganizada y una bien ordenada es que la última opción se planea en función de un tema. Con independencia de que este sea impecable y actual o bien común y usual, el diseño de una estantería en torno a un tema específico o bien a una mezcla de temas integrales sostiene el plan ajustado, firme y complejo.

Nos chifla ver una estantería con un plan de sombreado. Puede reunir tonos comparativos para un impacto que le da ese aspecto arreglado. Un entretenido proyecto de bricolaje es cubrir sus libros con un bonito papel para darle una gama de sombreado formalmente vestida. En todo caso, su anaquel facilitado por la sombra se asegura de parecer limpio y refinado.

Su gabinete por norma general se transforma en un sitio de atrapa para cada una de esas cosas que no están seguras de dónde ponerlas, haciendo que su presentación parezca desorganizada y desorganizada. Evita esto usando bonitos platos y cubos para guardar tus cosas más modestas de forma pragmática más a la moda.

Para hacer una estantería uniforme que refleje su estilo, llene los anaqueles con sus cosas de diseño estilístico más apreciadas. Una mezcla de superficies fascinantes, geniales obras de arte, impresiones tipográficas y complementos de estilo que atraigan la atención infunden interés visual a su estantería. Sencillamente asegúrese de continuar con su gama de tonos y el tema a fin de que no se sienta como un espectáculo de tienda de segunda mano.